Instruye al niño en su camino,
Y aun cuando fuere viejo no se apartará de él.
(Proverbios 22:6).
Y aun cuando fuere viejo no se apartará de él.
(Proverbios 22:6).
6. En Su Camino. Literalmente, "según la boca de su
camino"; es decir, "según su camino". Muchos padres han pensado que este versículo
les permite obligar al niño a seguir la profesión o el oficio que ellos han
escogido para él, proceder que ha traído tristezas y chascos, porque el niño,
una vez que ha crecido, muchas veces escoge un camino totalmente distinto.
Sería mejor entender que este versículo aconseja a los padres que estudien la
manera en que su hijo puede ser de mayor utilidad para sí mismo y para otros,
lo cual le proporcionará mayor felicidad. Las facultades de cada persona
determinan el lugar específico que ha de ocupar en la vida (Ed 259, 260).
A
cada persona Dios le ha designado un lugar en su gran plan (PR 393) y la ha
dotado con las facultades necesarias para ocupar ese lugar especial. Por lo
tanto, la elección de la ocupación de la vida debe estar en armonía con las
inclinaciones naturales. Los esfuerzos de los padres y del hijo debieran
concentrarse en descubrir la clase de trabajo para la cual éste está capacitado.
La inspiración afirma que este versículo manda que los padres dirijan, eduquen
y ayuden en el desarrollo del hijo, pero que para hacer esto, ellos mismos
"deben comprender el 'camino' por el cual debe andar el niño" (CM
104).
*CUÁNDO COMENZAR LA EDUCACIÓN DEL NIÑO.
LA EDUCACIÓN COMIENZA CON EL
LACTANTE.
La palabra "educación"
significa más que un curso de estudios.
La educación comienza cuando el niño está en los brazos de su
madre. Mientras la madre moldea y forma
el carácter de sus hijos, los está educando (Good Health, julio de 1880).
Los padres envían a sus hijos a
la escuela y cuando han hecho esto, piensan que ya los han educado.
Pero la educación es una cuestión más amplia de lo que muchos comprenden: abarca todo el proceso mediante el cual el niño es instruido desde el nacimiento a la segunda infancia, de la segunda infancia a la juventud, y de la juventud a la adultez. Tan pronto como un niño es capaz de formar una idea, debería comenzar su educación (Review and Herald, 27-6-1899).
Pero la educación es una cuestión más amplia de lo que muchos comprenden: abarca todo el proceso mediante el cual el niño es instruido desde el nacimiento a la segunda infancia, de la segunda infancia a la juventud, y de la juventud a la adultez. Tan pronto como un niño es capaz de formar una idea, debería comenzar su educación (Review and Herald, 27-6-1899).
COMENZAD CUANDO LA MENTE ES MÁS
IMPRESIONABLE.
La obra de educación y formación
debería comenzar en la primera infancia del niño, porque entonces la mente es
más impresionable, y las lecciones impartidas se recuerdan mejor (Carta 1,
1877).
Los niños deberían ser educados
en la escuela del hogar desde la cuna hasta la madurez. Y, como en el caso de cualquier escuela bien
llevada, los maestros mismos obtienen importante conocimiento; especialmente la
madre, que es la maestra principal en el hogar, debería allí aprender las
lecciones más valiosas para su vida (Pacific Health Journal, mayo de 1890).
Los padres tienen el deber de
pronunciar las palabras debidas. . . . Día a día deberían aprender en la
escuela de Cristo lecciones de Aquel que los ama. Luego la historia del amor eterno de Dios 27
será repetida a los tiernos niños en la escuela del hogar. Así, antes de que la razón se desarrolle plenamente,
los hijos pueden aprender de sus padres la actitud debida (Manuscrito 84,
1897).
CONSIDERAD LA PREPARACIÓN PRECOZ.
La preparación precoz de los
niños es un tema que debería estudiarse cuidadosamente. Necesitamos convertir el tema de la educación
de nuestros hijos en una preocupación, porque su salvación depende mayormente
de la educación que se les imparte en la niñez.
Los padres y guardianes deben mantener pureza en el corazón y en la
vida, si desean que sus hijos sean puros.
Como padres y madres, deberíamos educarnos y disciplinarnos. Luego como maestros del hogar, podremos
formar a nuestros hijos, preparándolos para la herencia inmortal (Review and
Herald, 8-9-1904).
REALIZAD UN BUEN COMIENZO.
Vuestros hijos son la propiedad
de Dios, comprada por precio. Tened
mucho cuidado, padres y madres, en tratarlos en forma cristiana (Manuscrito
126, 1897).
Los jóvenes deberían ser educados
cuidadosa y juiciosamente, porque los malos hábitos formados en la infancia y
la juventud a menudo perduran durante toda la vida. Que Dios nos ayude a ver la necesidad de
realizar un comienzo correcto (The Gospel Herald, 24-12-1902).
LA IMPORTANCIA DE EDUCAR AL
PRIMER HIJO.
El primer hijo debería ser
educado especialmente con mucho cuidado, porque él educará al resto.
Los niños crecen de acuerdo con la influencia de los que los rodean. Si son manejados por aquellos que son ruidosos y turbulentos, ellos también se convierten en ruidosos y casi insoportables.
(Manuscrito 64, 1899).
Los niños crecen de acuerdo con la influencia de los que los rodean. Si son manejados por aquellos que son ruidosos y turbulentos, ellos también se convierten en ruidosos y casi insoportables.
(Manuscrito 64, 1899).
LA PLANTA COMO LECCIÓN OBJETIVA DE
LA EDUCACIÓN DE LOS NIÑOS.
El desarrollo gradual de la
planta a 28 partir de la semilla, es una lección objetiva para la educación del
niño. "Primero hierba, luego
espiga, luego grano lleno en la espiga" (Mar. 4: 28). El que dio esta parábola, creó la semillita,
le dio sus propiedades vitales, y dictó las leyes que rigen su
crecimiento.
Y las verdades enseñadas por la parábola fueron hechas una realidad en su propia vida. El, la Majestad del cielo, el Rey de gloria, se hizo criatura en Belén, y representó por un tiempo a la infancia impotente que depende del cuidado materno. En su niñez habló y se condujo como niño, honró a sus padres, y realizó sus deseos en forma útil. Pero a partir del primer destello de inteligencia, fue creciendo constantemente en gracia y en conocimiento de la verdad. (La Educación, págs. 102, 103). 29
Y las verdades enseñadas por la parábola fueron hechas una realidad en su propia vida. El, la Majestad del cielo, el Rey de gloria, se hizo criatura en Belén, y representó por un tiempo a la infancia impotente que depende del cuidado materno. En su niñez habló y se condujo como niño, honró a sus padres, y realizó sus deseos en forma útil. Pero a partir del primer destello de inteligencia, fue creciendo constantemente en gracia y en conocimiento de la verdad. (La Educación, págs. 102, 103). 29
LA OBEDIENCIA ES LA LECCIÓN MÁS
IMPORTANTE.
LA TAREA SUPREMA: EL DESARROLLO DEL
CARÁCTER.
Ministerio Hno. Pio
No hay comentarios:
Publicar un comentario