lunes, 3 de agosto de 2020

189. LA VANIDAD DE LAS OBRAS HUMANAS PARA COMPLACER LOS SENTIDOS.

1 DIJE yo en mi corazón: Ven ahora, te probaré con alegría, 
y gozarás de bienes.  Mas he aquí esto también era vanidad.
2 A la risa dije: Enloqueces; y al placer: ¿De qué sirve esto?
3 Propuse en mi corazón agasajar mi carne con vino, y que anduviese mi corazón en sabiduría, con retención de la necedad, hasta ver cuál fuese el bien de los hijos de los hombres, en el cual se ocuparan debajo del cielo todos los días de su vida.
4 Engrandecí mis obras, edifiqué para mí casas, planté para mí viñas;
5 me hice huertos y jardines, y planté en ellos árboles de todo fruto.
6 Me hice estanques de aguas, para regar 
de ellos el bosque donde crecían los árboles.
7 Compré siervos y siervas, 
y tuve siervos nacidos en casa; 
también tuve posesión grande de vacas y de ovejas, 
más que todos los que fueron antes de mí en Jerusalén.
8 Me amontoné también plata y oro, y tesoros preciados
 de reyes y de provincias; me hice de cantores y cantoras,
de los deleites de los hijos de los hombres, 
y de toda clase de instrumentos de música.
9 Y fui engrandecido y aumentado más que todos los que fueron antes 
de mí en Jerusalén; a más de esto, conservé conmigo mi sabiduría.
10 No negué a mis ojos ninguna cosa que desearan, 
ni aparté mi corazón de placer alguno, 
porque mi corazón gozó de todo mi trabajo; 
y esta fue mi parte de toda mi faena.
11 Miré yo luego todas las obras que habían hecho mis manos, 
y el trabajo que tomé para hacerlas; 
y he aquí, todo era vanidad y aflicción de espíritu, 
y sin provecho debajo del sol. (Eclesiastés 2).

1. Dije yo en mi corazón. Es decir, "me dije". Aquí Salomón razona acerca de los deseos físicos y su satisfacción. Este soliloquio equivale a un acto de la voluntad. Compárese con el caso del rico que hablaba consigo mismo (Luc. 12: 17-19).
Te probaré. En otras palabras, "haré una prueba" o "experimento" 
para descubrir los resultados de cierta forma de conducta.
Alegría. La voz hebrea tiene un significado amplio: "gozo", "alborozo", "jovialidad", todo lo que proporciona placer. Aquí se restringe a las emociones y a los apetitos despertados al participar en placeres terrenales, aunque en otros casos la palabra puede significar alegría y gozo religiosos.
Gozarás de bienes. Heb. "mira lo bueno"; vale decir, "hártate de las buenas cosas de la vida". 
En lenguaje actual habría dicho: "¡Diviértete!" Salomón se propuso beber a grandes sorbos los placeres que ofrece el mundo hasta saciarse, en un esfuerzo por encontrar una satisfacción duradera en ellos.
2. Risa. Heb. Ñejoq. La palabra también significa "diversión" (Prov. 10: 23) 
y "escarnio" (Lam. 3: 14). 
La elección de diversiones y placeres sensuales como un medio para lograr finalmente la felicidad en la vida, representa un gran paso en el sendero descendente (ver PR 55, 56).
Enloqueces. Heb. "sin sentido", "necio". Compárese con la palabra hebrea similar (cap. 1: 17).
Placer. La palabra hebrea se usa para designar los placeres propios de un regocijo ostentoso y sensual, y los placeres comunes y lícitos. ¿De qué sirve esto? Heb. "¿qué hace esto?" 
¿Qué efecto tiene? o ¿qué resultados proporciona? Compárese con la oportuna pregunta de Pablo (Rom. 6: 2 1).
3. Agasajar Mi Carne Con Vino. Mejor dicho, "vivificar mi cuerpo con vino". "Vino", Heb. yáyin (ver com. Gén. 9: 2 1; Núm. 28: 7). Se usa para describir las "libaciones" tanto del servicio del santuario como de los ritos paganos (Exo. 29: 40; Lev. 23: 13; Núm. 15: 5, 7, 10; 28: 14). "Agasajar" o "regalar" se traducen de un vocablo que literalmente significa "tirar" o "tironear" (ver Sal. 28: 3 -"arrebates"-; 
Ose. 11:4 -"atraje"-). Dice, pues, Salomón: "Tiré de [o estimulé] mi cuerpo con bebidas embriagantes", como si el cuerpo fuera un vehículo tirado por un caballo, usado este último como símbolo del vino.
Anduviese mi corazón. Heb. "guiase". El mismo verbo se traduce como "llevar" y "guiar" (Deut. 4: 27; 28: 37; Sal. 48: 14; 78: 52; Isa. 49: 10). De acuerdo con la metáfora implícita, Salomón intentaba que su buen juicio le permitiera satisfacer todo apetito y entregarse a las pasiones con moderación. En otras palabras, al proyectar su experimento (ver com. vers. 1), no se proponía ser tan imprudente que cayera en excesos. Por supuesto, ésta es la intención de la mayoría de los que se entregan a los placeres sensuales; pero es un engaño fatal: no se puede usar con moderación lo que es malo en sí.
Necedad. En este caso quizá signifique "lo que puede llevar al pecado" sin ser algo pecaminoso en sí mismo. Esto parece significar que Salomón se entregó a tales experiencias para disfrutar de ellas al máximo, con el propósito de aprender personalmente las satisfacciones que podían ofrecerle, pero sin permitir que lo dominaran.
Hasta ver cuál fuese. Salomón declara explícitamente su propósito. Nadie lo obligaba a portarse en esa forma tan arriesgada e insensata. Dios no podía alabarlo por hacer esto.
Hombres. Heb. 'adam, término genérico que incluye tanto a hombres como a mujeres.
 (ver com.  Gén. 1: 26; 3: 17; Núm. 24: 3).
Todos. Heb. "número" o "cuento", de la raíz safar, "recontar", "contar", "relatar", 11 medir". 
El sustantivo sefer, "libro", deriva de la misma raíz.
4. Engrandecí Mis Obras. Sin duda se refiere a la dimensión y al esplendor de los edificios que construyó, una fuente de complacencia más aceptable que la de los vers. 1-3 
(ver 1 Rey. 7: 1; 9: 1).
Edifiqué para mí casas. Salomón se dedicó mucho a edificar (1 Rey. 7: 1-12; 9: 15-19).
Viñas. Compárese con Cant. 8: 1 1. La condición económica del pueblo común en los días de Salomón se indica en 1 Rey. 4: 25: "Cada uno debajo de su parra y deba o de su higuera".
5. Huertos. Heb. "corrales" o "recintos", del verbo "encerrar", "rodear". Debido a que cabras, asnos y otros animales del Cercano Oriente pastan sin restricciones, es imposible tener un huerto sin un vallado fuerte y bien cuidado.
Jardines. Heb. pardes, del persa pairi-daeza, que designaba los extensos jardines botánicos y zoológicos de los reyes persas (ver com. Gén. 2: 8). Un pardes era un coto real vedado, un corral o parque. "Paraíso" deriva de la forma griega de esta palabra -parádeisos-. Pardes aparece en Neh. 2: 8 como "bosque", y en Cant. 4: 13 como "paraíso". Ver com. Gén. 2: 8.
Árboles. Es evidente que Salomón se entregó a un extenso programa de horticultura. Se especializó no sólo en "jardines", que llamaríamos parques, sino también en huertos de árboles frutales. Tenía un huerto real en las laderas de los montes del sur de Jerusalén (2 Rey. 25: 4), una viña en Bet-haquerem, "la casa del viñedo", identificada por algunos con Ain Karem, a unos 7 km. al oeste de Jerusalén.
 (Jer. 6:1), pero más recientemente con Ramet Rahel, a unos 4 km. al sur de Jerusalén; 
y otra en Baal-hamón (Cant. 8: 11).
6. Estanques. La lluvia es insuficiente en Palestina (ver t. II, pág. 113; com. Gén. 12: 10). 
En esas regiones se necesita ahora, como en la antigüedad, el riego artificial. Los agricultores construían estanques o depósitos. "El estanque del Rey" (Neh. 2: 14) es llamado por Josefo "el estanque ... de Salomón" (Guerra de los judíos v. 4. 2). Los llamados pozos de Salomón probablemente daten del tiempo de los romanos. El más grande medía aproximadamente 183m (600 pies) por 63 m (207 pies), y 15 m (50 pies) de profundidad. Estos estanques se encuentran a unos 5 km. (3 millas) al sudeste de Belén. Salomón también puede haber construido viveros para peces, y 1087 criado varias clases de ellos (Cant. 7: 4). En vista de la escasez relativa de agua en el Cercano Oriente, es interesante notar que la palabra "estanque" se la deriva de la raíz "bendecir".
7. Siervos Y Siervas. Se necesitaba un numeroso séquito de siervos y de obreros para atender los vastos proyectos de Salomón. La reina de Sabá quedó asombrada al ver la cantidad de empleados que había en los establecimientos de Salomón (1 Rey. 10: 5). Sin duda tenía esclavos que no eran hebreos (1 Rey. 9: 21; 2 Crón. 8: 8), y además una gran cantidad de siervos hebreos sometidos a un tipo de servidumbre más suave (ver com. Exo. 21: 2, 20; Deut. 15: 12,15).
Siervos nacidos en casa. Heb. "hijos de la casa fueron para mí". Además de los que había adquirido, los esclavos comprados o capturados engendraban hijos. Hay registro bíblico en cuanto al número de los siervos de Salomón (1 Rey. 4: 21-27; 10: 25, 26).
De vacas y de ovejas. El número imponente de los rebaños y de las manadas de Salomón podemos suponerlo por la cantidad de los sacrificios ofrecidos durante la dedicación del templo (1 Rey. 8: 63). Además de los sacrificios que se ofrecían, se necesitaba una gran cantidad de carne para el ejército de siervos y de esclavos que tenía el rey.
 (1 Rey. 4: 22, 23; 1 Crón. 27: 29-31).
8. Plata Y Oro. En varios pasajes se habla de la riqueza de Salomón en metales preciosos y en utensilios de oro y plata (1 Rey. 9: 28; 10: 14-27; 2 Crón. 1: 15; 9: 20-27). El tributo que el rey de Asiria impuso a Ezequías se pagó en parte con la tesorería del rey (2 Rey. 18: 14-16). Ezequías también exhibió su acopio de riquezas a los representantes del rey de Babilonia.
 (2 Rey. 20: 13).
Tesoros preciados. Heb. "posesiones". Quizá esta expresión se refiera a los tributos e impuestos de diversas clases que cobraba Salomón. "Tesoros preciados" se traduce de un término que también Dios aplica a su pueblo: "especial tesoro" 
(Exo. 19: 5; Sal. 135: 4; cf. Deut. 7: 6; 14: 2; 26: 18; Mal. 3: 17).
De provincias. Debe referirse a impuestos cobrados a gobernantes vasallos y a sus pueblos.
 (ver 1 Rey. 4: 21, 24; 10: 15).
Cantores. Salomón debe haber recibido muchos huéspedes, incluso visitantes de muchos países. Esto demandaba una gran cantidad de gente especializada para atenderlos.
 (ver 2 Sam. 19:35; Amós 6:5).
De toda clase de. Esta frase es añadida. No pertenece al original.
Instrumentos de música. Heb. shiddah weshiddoth, que generalmente se piensa que significa "muchas concubinas", literalmente, "una concubina y concubinas". Es dudosa la etimología de shiddah, pero quizá derive del verbo "despojar", aplicado a la captura de las mujeres de un pueblo derrotado. También podría provenir de un verbo equivalente a la palabra arábiga "humedecer", de la cual los hebreos han derivado una palabra que significa el pecho femenino. La LXX sugiere "coperos y coperas". Tal vez Salomón quiso decir: "Me hice de ... los deleites de los hijos de los hombres, una esposa y esposas", lo cual, por supuesto, hizo Salomón. Según esta explicación, shiddah weshiddoth sería comparable con rajam rajamatháyim, "una doncella o dos", literalmente, "una matriz o dos" (Juec. 5: 30).
9. Fui Engrandecido. Con manifiesta satisfacción, Salomón reflexiona en cuanto a la grandeza de su reino con un espíritu muy parecido al de Nabucodonosor cuando se jactaba de su gloria: 
"¿No es ésta la gran Babilonia que yo edifiqué para casa real con la fuerza de mi poder, y para gloria de mi majestad?" (Dan. 4: 30). Aquí Salomón se jacta de haber sobrepujado a todos sus predecesores -aun a su padre- en riqueza y sabiduría.
Conservé conmigo mi sabiduría. Heb. "mi sabiduría permaneció conmigo". Podría entenderse como que su sabiduría se mantuvo cerca de él, en el sentido de ayudarle a adquirir todas sus posesiones, o que le impidió que llegara a excesos en cualquier complacencia (ver com. vers. 3). Los comentadores judíos sugieren ambas ideas. En medio de su necedad, Salomón pensaba que era sabio, así como un ebrio piensa que está sobrio.
10. Desearan. Heb. sha'al, literalmente, "pidieran", "requirieran". El nombre popular hebreo Sha'ul, "Saúl", literalmente, "requerido", deriva de esta raíz (ver com. 1 Sam. 9: 2). Salomón quiere decir aquí que llegó a extremos, que hubo poco -si es que lo hubo- que él no probara (ver 1 Juan 2: 15-17).
Placer ... gozó. Heb. Ñimjah ... Ñaméaj, el sustantivo deriva del verbo. Ambas palabras pueden referirse prácticamente a cualquier clase de emoción placentera, ya sea en la experiencia religiosa, en un placer legítimo, en el trabajo, o en la disipación y el libertinaje. Salomón afirma, sin duda alguna, que probó el fruto de todo lo que estudió y emprendió.
Parte. Es decir, "porción" o "recompensa", ya fuera de botín, despojo, alimento, propiedad, o manera de vivir. Sin duda Salomón se refiere a su modo de vivir, a su carrera tras la felicidad.
11. Miré. Heb. "me volví hacia", para observar con especial cuidado. La palabra hebrea significa mucho más que "mirar sin prestar atención". 
El sustantivo de esta raíz, que significa "rostro", contiene la idea de dirigir el rostro hacia algo a fin de tomar nota de ello. Además, en hebreo se usa el pronombre enfático como si Salomón hubiera dicho: "Yo personalmente di importancia a".
Aflicción de espíritu. Ni los banquetes ni festines, ni la música, ni los placeres sensuales proporcionan una satisfacción perdurable. Según Juan 4:24, "Dios es Espíritu", no "un Espíritu" en el sentido de ser un espíritu entre muchos, sino absoluta y esencialmente espíritu. Y el ser humano debe llegarse a Dios mediante su propio espíritu, y sólo en una unión tal, puede hallar perfecta satisfacción y contentamiento. Salomón llegó a la conclusión de que todos los placeres de] mundo no eran sino "viento", "aliento", o "un afanarse en pos del viento"
 (ver com. cap. 1: 14).
Provecho. Ver com. cap. 1: 3. "Provecho", término importante en la filosofía del libro de Eclesiastés, en el cual aparece diez veces.  No está en ninguna otra parte del AT. Salomón probó cada experiencia, cada empresa, cada placer, en los que se complació buscando el "provecho" que pudiera obtener. 
El significado literal de la raíz hebrea de "provecho" es "excedente" o "saldo". Se ha sugerido que quizá se trata de un término propio de las relaciones comerciales judías.
Debajo del sol. Expresión que aparece 29 veces en el Eclesiastés, para referirse al círculo de la actividad humana. Hay expresiones similares en diversos idiomas. 3CBA
Ministerio Hno. Pio

No hay comentarios:

Publicar un comentario